Mucha gente se interroga sobre qué es el capital de trabajo. Sobre todo, gente que labora profesionalmente en ámbitos administrativos. Y es que este concepto es sumamente útil para saber la capacidad de inversión. Permite saber expectativas y límites, así como el monto que se puede arriesgar en un nuevo proyecto. Por ello, es necesario conocer su alcance, liquidez y cantidad.
Si tenemos que movernos en el plano más estricto de las definiciones, podemos aseverar que se trata del capital necesario para que una empresa pueda operar. Vale decirse que suele llamarse al “capital de trabajo” con el denominativo de “activo corriente”. Suele estar conformado por efectivo, inversiones a corto plazo, cartera, inventarios, etc.
¿Cuál es la utilidad del llamado capital de trabajo o activo corriente?
Como ya indicamos antes, se trata del capital necesario para que una empresa pueda funcionar. Por tal sentido, implica todos los gastos operativos. Hay que tener en cuenta que toda empresa necesita ciertos insumos para su labor: en materia prima, material de papelería, pagar la mano de obra, activos fijos, mantenimiento, publicidad, etcétera.
Estos recursos tienen una característica muy particular: deben estar disponibles siempre a corto plazo. No resulta de utilidad que estén disponibles en un tiempo demasiado prolongado, mismo que no permite tener a la mano estos recursos para ser usados de inmediato.
De nada sirve tener el capital a largo plazo. Hay que tener en cuenta que los gastos operativos deben cubrirse de manera rápida, estar siempre disponibles para que el funcionamiento de la empresa sea constante. Por lo tanto, quienes administran una determinada compañía deben apartar el dinero del capital para que tenga mucha liquidez. No debe estar en plazos fijos, ni comprometido en otros gastos. Es un dinero que debe estar libre y a la mano. De lo contrario, no se pueden cubrir los gastos operativos de funcionamiento.
Cálculo matemático del capital de trabajo
Hay que recordar que estamos en el mundo de la administración y de la contabilidad. Es necesario conocer los montos exactos para poder movilizar y usar el dinero de manera correcta. En tal sentido, es menester conocer la fórmula matemática para tener a la mano el monto total del capital de trabajo. Es necesario saber esta cantidad de manera correcta y exacta. Igualmente, es necesario conocerlas para poder sumar o restar flujo de capital a la misma.
Básicamente, podemos decir que la fórmula para calcular el capital de labores se corresponde al hecho de restar los pasivos corrientes a los activos corriente. Esto lo podemos expresar de la siguiente manera:
ACTIVOS CORRIENTES – PASIVOS CORRIENTES = CAPITAL DE TRABAJO
Antes de proseguir, es necesario indicar a nuestros lectores la diferencia entre pasivos y activos. Para ello, mostramos las dos definiciones a continuación:
Pasivos: son los compromisos de pago de la empresa, se puede decir que son las deudas; se trata de dinero comprometido y por ende no debe ser considerado como activo de trabajo.
Activos: es el dinero que tiene la empresa. Hay que decir que los activos siempre se clasifican en base a su liquidez.
Como es de suponerse, ocurre que una empresa debe tener mayor cantidad de activos que de pasivos para no tener un saldo negativo. Si esto sucede, entonces ocurre una mala situación: la empresa solo puede funcionar si deja de pagar sus compromisos y deudas. Por ende, es algo que no debe suceder.
La liquidez y su relación con el capital de trabajo
Hay que dejar en claro que este capital y la liquidez son cosas que van de la mano desde el punto de vista administrativo, sobre todo en lo tocante a la capacidad y un empresa para invertir o arriesgar parte de su capital. Es por este motivo que se dice que el capital suele estar muy imbricado con un concepto llamado “razón corriente”. Esta última se calcula dividiendo el activo corriente entre los pasivos corrientes de una compañía. La idea es que esta razón corriente tenga un valor mínimo de 1:1.
Cuando una empresa tiene una razón corriente de 1:1 quiere decir que su capital es = 0. Es decir, que para que alargar dato que tiene cuenta con la cantidad de dinero exacta para poderlo sufragar. Es por ello, que para que exista el capital de trabajo es necesario que la razón corriente sea superior a 1.
Hay que decir que cuando una empresa tiene la razón corriente igual a 1, no quiere decir que dicha empresa está fuera de las condiciones de poder operar. Lo que no puedes invertir en acciones nuevas. Tiene justo el dinero necesario para cumplir con los requisitos que tiene; por lo tanto no puede aventurarse a invertir en nuevas áreas para generar ganancias.
Lo antes dicho, también tiene una consecuencia puntos cuando la razón corriente es igual a 1; entonces quiere decir que la empresa no tiene liquidez. En todo el dinero que tiene lo tiene comprometido en algún tipo de gasto. Por lo tanto, no tiene para pagar gastos inmediatos. Todos los gastos estar inmerso en un cronograma de pagos que no puede suspender. Por ende, necesita aumentar sus ganancias para tener mayor liquidez y de esa manera poder moverse con mayor comodidad.
La solución ante la falta de liquidez, en ciertos casos se arregla con financiamiento. Esto quiere decir obtener préstamos. Muchas empresas lo hacen. Para enfrentar un nuevo proyecto o invertir, piden un préstamo. No obstante, los préstamos tienen el problema de que con el tiempo se convierten en intereses que hay que pagar. Toda inversión que se hace con un préstamo, forzosamente debe generar ganancias para poder pagar los intereses de dicho préstamo. De lo contrario, la empresa caí en deudas que luego le va a costar mucho poder pagar.
La relación entre capital de trabajo y flujo de caja
Por otra parte, hay que considerar que hay una relación constante entre concepto de capital y el flujo de caja. Hay que tener en cuenta que el incremento de flujo de caja es el que garantizan existencia y una mayor cantidad de capital. Importante: no hay que confundir la noción del capital del trabajo con la de ganancia. La ganancia es un porcentaje nieto, apartado y que no se invierten el funcionamiento de la empresa. En cambio el capital es un porcentaje del flujo de caja usado para mejorar o mantener la capacidad operativa de una compañía.
Hay que tener en cuenta que una compañía efectiva es aquella que logra un altísimo flujo de caja con una mínima inversión, o también con una mínima utilización de los activos. De hecho, está lo que buscan todas las empresas. No tiene sentido tener un margen de ganancia a cambio de un enorme gasto de dinero, o de tiempo utilizado.
Lo antes dicho hace que muchos economistas busquen la manera de mejorar el flujo de caja con un mínimo de inversión, bien sea de dinero de tiempo. Vale decirse que esté la clave de las grandes empresas exitosas. Es la única manera en que logran diversificar su oferta, trabajar más y obtener una buena cantidad de ganancias.
Vale decirse que la cantidad de capital disponible, permite que la empresa pueda operar correctamente. No obstante, cuando esta cantidad es abundante; entonces se puede invertir por aumentar la producción y por ende tener una mayor cantidad de ganancia. En suma, hay que tener en cuenta que una empresa está hecha para ganar dinero y todo los arreglos y trabajos que se hacen es con este fin.
El llamado capital de trabajo neto y operativo
Se hace referencia al neto y operativo a un concepto mucho más profundo. Básicamente, se trata de los activos que participan únicamente en la generación de recursos. A esto se le restan las cuentas por pagar. Es decir, no participan los activos que funcionan para el mantenimiento un funcionamiento cotidiano y normal de la empresa. Solamente se toman en cuenta aquellos activos usados como inversión que luego se van a multiplicar en el flujo de caja.
Por otra parte, se supone que el efectivo de una empresa debe estar cercano a cero. Esto quizá suene extraño, pero la realidad es que ninguna compañía puede darse el lujo de tener una enorme cantidad de efectivo ocioso. Hay que recordar que el dinero tiende a devaluarse. Además, en efectivo que está ocioso nos está invirtiendo ni se está multiplicando.
Lo antes dicho va en contra de cualquier proceso de producción y de generación de ganancia. De ahí que viene la importancia de la noción de capital que es de trabajo y el capital neto operativo. Las empresas que dejan invertir para aumentar su ganancia, son empresas que dejan de crecer. Por lo tanto, tienen el riesgo de quedarse estancadas.
Las estrategias referentes al capital de trabajo
En caso de verse menguado, siempre debe financiar sobreponerse. Esto se debe que sin este capital, la empresa no puede funcionar de manera adecuada. Incluso, si no puede pagar proyectos de inversión sin un capital mínimo ni siquiera puede mantener sus gastos operativos rutinarios.
Cuando el capital disminuya considerablemente, es necesario evaluar las políticas de la empresa. Incluso, en caso de emergencia puede ser necesario pedir un financiamiento para poder reponer el que la empresa continúa trabajando.
Esta última es una situación extrema que se debe evitar. Sin embargo, cuando las empresas corren riesgos grandes en sus inversiones; suelen caer en la necesidad de pedir préstamos para poder mantener su capital de trabajo constante. Por supuesto, cuando esto sucede porque las empresas tienen esperanza de que la inversión generada tenga una ganancia tan grande que les permita pagar los intereses del préstamo solicitado.