Existen diferentes enfermedades psicológicas relacionadas con desórdenes alimenticios y que afectan a millones de personas a nivel mundial. La más conocida de ellas es la llamada anorexia; la cual afecta en su mayoría a mujeres, al igual que otras enfermedades similares.
No obstante, existe otro problema que es considerado como la etapa previa a la anorexia y se llama permarexia. Esta condición muestra los síntomas que son también comunes a otros desórdenes alimenticios, pero si se trata a tiempo se puede evitar el desarrollo de otras condiciones más difíciles de tratar.
Permarexia definición
Se caracteriza por la obsesión por parte del paciente de contar las calorías de los alimentos, los cuales no pueden ser consumidos sin antes ser analizados. El problema con este padecimiento es que de acuerdo al pensamiento de la persona afectada, esta puede dejar de consumir ciertos grupos de alimentos que son básicos para mantener una buena salud. Lo peligroso de esta condición es que el paciente vulnera su estado llevándolo al extremo de la malnutrición y hasta la muerte, todo por el déficit de mantener una dieta balanceada.
El problema es que se vuelve una obsesión el hábito de contar calorías, todo llevado hasta el límite para lograr controlar su peso. Por lo general; la persona con permarexia siempre está siguiendo una dieta estricta que usualmente no está respaldada por la visita o los consejos de un nutricionista profesional. El paciente suele seguir sus propias reglas y establece por sí misma cuáles son los alimentos que le ayudarán a alcanzar su meta; aunque sin darse cuenta que lo que realmente está haciendo es afectar a su salud.
Causas de la permarexia
Es causada por diversos factores que, en común, se caracterizan por una combinación de elementos ambientales y psicológicos. Si bien es cierto que cada persona debe estar interesada en el valor nutricional que poseen lo alimentos, con la finalidad de mantenerse sana, muchas personas terminan tergiversando la información que se relaciona con algunos tipos de alimentos. Además, siempre se ha mantenido cierta presión social por mantener una imagen física ideal aceptada por muchos, que sin embargo para algunos es difícil de alcanzar.
La noción de una apariencia saludable, y los alimentos que se deben consumir, proviene de fuentes tan diversas como los medios de comunicación masivos. Estos pueden alterar la compresión que se tiene sobre lo que realmente puede beneficiar a la salud. Si en la familia ya existe la presencia de personas con trastornos alimenticios, estos hábitos pueden ser heredados a otros miembros. Inclusive; las personas que tienen tendencias a padecer obsesiones, así como a ser perfeccionistas, son más propensas a padecer estos tipos de condiciones.
Permarexia síntomas
Hay una serie de síntomas que son comunes en la mayoría de los pacientes con permarexia. Sin embargo, cada caso es diferente. Por ello; es mejor visitar a un profesional de la salud para que realice un diagnóstico acertado. A continuación, veremos cuáles son los síntomas que aparecen en las primeras etapas de la enfermedad hasta finalmente aquellos síntomas que demuestran cómo puede evolucionar el padecimiento:
1) El primer síntoma suele estar relacionado con la obsesión y exigencia por parte del paciente de lograr alcanzar el cuerpo ideal. Por lo general, sus ideas están basadas en adaptarse a un estereotipo de cuerpo para aceptado por la sociedad, de acuerdo a lo que aparecen en las fotos de revistas de modas, o en programas televisivos, por ejemplo.
Comúnmente; los pacientes tratan de alcanzar una imagen que no es real y que ha sido modificada; pero no pueden darse cuenta de ello. Realmente; el paciente cree que si logra modificar su cuerpo, logrará sentirse mejor. Usualmente, se establece metas casi imposibles lograr; lo que finalmente desencadena un estado de frustración permanente.
2) Demuestran poseer baja autoestima, es fácil observar en estas personas que hay falta de seguridad sobre todo relacionado con respecto a su aspecto físico. Por ello, creen que no poseen ningún otro tipo de virtud. Además, creen que al mejorar su apariencia física lograrán ser aceptados socialmente.
3) Presentan problemas sociales relacionados con la aceptación y las relaciones interpersonales. Independientemente del tipo de situación que se presenten, estas personas siempre piensan que las personas a su alrededor están en su contra o que no les aceptan.
Sus relaciones sociales son inestables y paulatinamente minimizan considerablemente su asistencia a eventos como fiestas o reuniones, ya que saben que estarán en un entorno donde les ofrecerán alimentos con muchas calorías. Pueden llegar a culpar al organizador del evento, pues se vean obligados a consumir alimentos que no están del trono de su dieta.
4) Presentan problemas emocionales como trastornos de ansiedad o episodios de depresión. Ello se debe a que, comúnmente, se sienten frustrados al no observar resultados positivos en su cuerpo después de estar siguiendo régimen alimenticio estricto. También; pueden presentar otros tipos de problemas psicológicos como el Trastorno Dismórfico Corporal; y otros similares que demuestran que el paciente no se siente satisfecho con su cuerpo.
5) El paciente no reconoce que tiene la enfermedad, ya defiende su causa diciendo que trata temas salud al estar pendiente de su peso y nutrición. Realmente; creen que las decisiones que está tomando no vulneran su salud. Por ello, Al principio es difícil hacerles entender que están padeciendo de permarexia.
6) Gracias al uso de las redes sociales y el uso libre del Internet, los pacientes siempre estarán buscando todo tipo de dietas diferentes que puedan ajustarse a sus necesidades a corto plazo. Usualmente; es fácil encontrar cuál es la dieta que está de moda y la seguirán hasta que encuentren otro que les parezca mejor y así sucesivamente.
7) Además de dejar de consumir ciertos tipos de alimentos, también empezarán a incluir en su régimen diario ejercicios que no necesariamente sean los más indicados para su cuerpo. Sin embargo, este último síntoma no suele ser el más común a lo que si la persona está siguiente una dieta que indique la realización de un ejercicio específico sin duda el paciente lo realizará.
Finalmente; todos estos síntomas repercuten en otros ámbitos de la vida del paciente, tanto en el aspecto social, familiar, profesional y con todas las personas que estén en contacto. El paciente puede mostrarse irritable, apatía y además siempre estará hablando acerca de comida y de dietas lo cual empezar a hacer muy notorio para los demás.
Ortorexia permarexia
La ortorexia es un trastorno psicológico que se caracteriza por la obsesión por analizar los alimentos según su calidad, así como por la cantidad. Quien lo padece, no se alimentará de ningún tipo de producto que no haya sido previamente inspeccionado: revisando el tipo de ingredientes, proceso de elaboración, procedencia, porciones y cualquier detalle que considere importante.
Estas personas inclusive sienten que se alimentan de una mejor manera a como lo hacen los demás. Sienten también la necesidad de hacer que personas cercanas tomen de ejemplo las acciones que ellos mismos hacen. Pueden decidir no alimentarse de comidas que no sean saludables; hasta el punto de eliminarlas por completo de su dieta diaria. Si por alguna razón las consumen, por error o tentación, se castigan a sí mismas por ello.
Este trastorno no suele ser mencionado junto a los otros relacionados con la alimentación, pero las personas que presentan los síntomas han ido en aumento. Una práctica que comenzó con el propósito de mejorar la salud, en realidad comienza a obstaculizarla. Al final, el paciente termina padeciendo otras condiciones relacionadas con una alimentación poco saludable, como lo son la debilidad de los huesos, problemas con el sistema inmune y deficiencia de vitaminas sólo por mencionar algunas consecuencias.
Consecuencias de la permarexia
Las consecuencias son perjudiciales para la salud; ya que estos síntomas suelen extenderse por un largo período de tiempo hasta que alguien del entorno cercano se empieza a dar cuenta de los síntomas que presenta el paciente. La persona afectada no suele darse cuenta de su condición, hasta que alguien llama su atención. Psicológicamente; piensan que están ayudando a sí mismas al evitar alimentarse con comidas que no son adecuados para mantener su peso; idealizando su dieta como la adecuada para bajar la obesidad en poco tiempo.
La persona que padecen esta condición piensa que simplemente se preocupa por tener hábitos alimenticios saludables, cuando en realidad la obsesión por restringir el consumo de algunos alimentos― así como contar calorías constantemente ―puede tener consecuencias negativas en la salud; las cuales serán difíciles de tratar posteriormente en caso de no ser tratado con tiempo.
Hay que tomar en cuenta que, al someterse a diferentes tipos de dietas, provoca en el cuerpo frecuentes variaciones en el peso, dado a que no hay control. Usualmente; el resultado es una condición denominada “efecto rebote”, haciendo que el paciente se sienta aún más presionado y desilusionado ante la situación.
El cambio constante en el peso es capaz de alterar el funcionamiento de la glándula llamada tiroides, fundamental en la regulación del metabolismo. También; ocasiona hipoglucemia, lo cual quiere decir que tendrá bajo niveles de azúcar en sangre, presentará mareos y problemas de visión.
Por otra parte; los problemas intestinales serán una de las consecuencias que se notarán casi inmediatamente. La aparición de úlceras gástricas es común así como también de estreñimiento y de otros tipos de deficiencias nutricionales. Finalmente, con este padecimiento se abre paso a otras condiciones relacionadas con trastornos alimenticios que ocasionaran problemas más graves o más difíciles de tratar. El paciente se hace vulnerable ante la bulimia y la anorexia, sino se alimenta adecuadamente morirá por mal alimentarse.